Las causas residen principalmente en el comportamiento de marcha y también, en ocasiones, en la alineación de ejes.
Desgaste lateral elevado
El desgaste lateral, generalmente en combinación con características de borrado en la nervaduras del perfil y cortes finos, aparece cuando los neumáticos ruedan con una deriva extrema y por ello tienen un efecto de "borrado" sobre la calzada.
Una conducción rápida por tramos virados origina un desgaste acrecentado de los hombros de los neumáticos.
El hombro del neumático redondeado en combinación con un desgaste excesivo de los tacos exteriores del dibujo indica que se conduce con frecuencia a gran velocidad en los tramos con curvas. Esta característica de desgaste está influida por el estilo de conducir.
El tren de rodaje se ajusta a determinados valores de convergencia y caída para optimizar el comportamiento de marcha. Si los neumáticos ruedan en condiciones diferentes a las prescritas hay que contar con un desgaste lateral elevado.
Especialmente en valores erróneos de convergencia y caída puede producirse un desgaste lateral elevado, creciendo el riesgo de que se produzcan erosiones diagonales.
Divergencia o convergencia negativa
La distancia de las ruedas entre sí es mayor delante -A- que detrás -B- (-C- sentido de marcha).
Divergencia o convergencia positiva
La distancia de las ruedas entre sí es menor delante -A- que detrás -B- (-C- sentido de marcha).
Para evitar el desgaste lateral de los neumáticos debe observarse que el ajuste de las ruedas se encuentre dentro del margen de tolerancia prescrito por el fabricante del vehículo. El desequilibrado más frecuente en las ruedas se debe a efectos externos, p. ej., al golpear con el bordillo al aparcar.
Al efectuar una medición de geometría de ejes puede determinarse si el equilibrado de las ruedas está en el margen de tolerancia o si es necesario llevar a cabo un equilibrado.
Modificaciones en el tren de rodaje
En caso de rebajar el tren de rodaje o montar llantas de aleación ligera no recomendadas por SEAT, puede originarse un desequilibrado de las ruedas al circular.
A causa del brazo de palanca modificado debido a la menor altura y a la posición de las ruedas en marcha, se produce un desgaste irregular, a pesar de estar todos los valores en el margen de tolerancia al efectuar una verificación de la geometría de ejes con el vehículo parado.
Para evitar que los neumáticos se desgasten sólo por un lado, se tendrá que garantizar por un lado el ajuste correcto de la geometría de ejes y por otro lado un uso del vehículo conforme al empleo previsto:
El buen mantenimiento del vehículo y de los neumáticos paliará el desgaste de los mismos. Para ello se tendrán en cuenta los siguientes consejos:
Desgaste del hombro externo
Para evitar que los neumáticos se desgasten sólo por un lado, se tendrá que garantizar por un lado el ajuste correcto de la geometría de ejes y por otro lado un uso del vehículo conforme al empleo previsto:
El buen mantenimiento del vehículo y de los neumáticos paliará el desgaste de los mismos. Para ello se tendrán en cuenta los siguientes consejos:
Desgaste central
Este tipo de desgaste es característico de las ruedas motrices de vehículos potentes, que circulan con frecuencia durante largos trayectos a elevadas velocidades.
Debido a la fuerza centrífuga, al circular a grandes velocidades el diámetro del neumático será más pronunciado en la parte central de la banda de rodadura que en los hombros. La propulsión se transmite desde la parte central de la banda de rodadura a la calzada, lo que se refleja en el tipo de desgaste del neumático.
Estos efectos pueden aparecer especialmente marcados en neumáticos anchos.
Este desgaste no se puede contrarrestar reduciendo la presión de inflado del neumático.
¡ATENCIÓN!
Por motivos de seguridad, la presión de inflado del neumático no puede ser reducida por debajo del valor prescrito.
Se obtiene un desgaste más regular cambiando oportunamente las ruedas del eje propulsor al otro eje.
Desgaste elevado de la banda de rodadura
Desgaste típico de neumáticos del eje propulsor de un vehículo potente.
El elevado desgaste de la parte central de la banda de rodadura tiene su origen en los esfuerzos relacionados con la fuerza centrífuga del neumático y la transmisión de la fuerza motriz.
Erosión diagonal
Erosiones diagonales
La erosión lateral se produce con un ángulo de aprox. 45º con respecto al perímetro del neumático.
Aparece la mayoría de las veces en un punto, pero en otras ocasiones lo hace en varios puntos del perímetro.
La erosión aparece casi exclusivamente en posiciones de rueda de marcha libre, especialmente en el lado trasero izquierdo. Existen modelos de vehículo en los cuales aparece la erosión con frecuencia, y otros en los que no se presenta el problema. El efecto es reforzado por valores altos de convergencia. Los valores situados por debajo del límite inferior de tolerancia mejoran el desgaste.
En la parte de las erosiones diagonales más fuertes se encuentra con frecuencia la unión de los componentes del neumático.
La rueda que gira bajo convergencia lo hace también al marchar en línea recta bajo una deriva. Esto lleva a una deformación diagonal en la zona de contacto neumático/calzada.
El desgaste se ve favorecido por una conducción con presión reducida. Para evitar un desgaste de este tipo deben ser iguales los valores de convergencia de ambas ruedas traseras y mantenerse la presión de inflado prescrita.
Intercambiar las ruedas en el eje motriz cuando comiencen las erosiones, siempre que éstas se encuentren en un estadio inicial. Las erosiones profundas son irreparables.
Error en el ajuste
En caso de reclamación de "erosiones diagonales" se verificará la geometría de ejes. Si ésta es correcta, la causa de las erosiones diagonales estará seguramente en los neumáticos.
Los neumáticos con erosiones diagonales causadas por un ajuste incorrecto de la geometría de ejes quedan excluidos de la garantía.