Observaciones básicas
Conservación del vehículo
El lavado y la conservación del vehículo, efectuados con regularidad, contribuyen a mantener el valor del mismo. Puede ser una premisa para hacer valer el derecho a garantía en caso de corrosión de la carrocería o desperfectos de la pintura.
La mejor manera de proteger su vehículo contra las influencias nocivas del medio ambiente es gracias a un buen mantenimiento y un lavado frecuente. Cuanto más tiempo permanezcan sobre la superficie del vehículo los restos de insectos, excrementos de pájaros, resinas de árboles, polvos industriales y de la calle, manchas de alquitrán, partículas de hollín, sales antihielo y otro tipo de suciedad agresiva, más persistentes serán sus efectos destructivos. Las altas temperaturas, por ejemplo, debido a una radiación solar intensa, refuerzan el efecto corrosivo.
Después del invierno, cuando se hayan dejado de esparcir las sales antihielo, se deberán también lavar a fondo los bajos del vehículo.
Productos para la conservación
En los servicios técnicos podrá adquirir los productos necesarios para la conservación de su vehículo. Guarde las instrucciones de los productos de conservación hasta agotarlos.
ATENCIÓN
Manténgalos fuera del alcance de los niños.
De lo contrario, existe peligro de intoxicación.
CUIDADO
No intente jamás quitar la suciedad, el barro o el polvo cuando la superficie del vehículo esté seca. Tampoco utilice un trapo o una esponja secos, ya que de lo contrario la pintura o las ventanillas de su vehículo podrían sufrir desperfectos. Para limpiar la suciedad, el barro o el polvo deberá utilizar bastante agua.
Nota relativa al medio ambiente
Para su eliminación tenga en cuenta las instrucciones que figuran en los envases.